Archive for junio 2015
Adios a todo esto, creo que voy a poner un bar.
Este ha sido el paisaje de mis mañanas durante los últimos ocho años. La cuesta de tierra que va de la carretera donde me deja el autobus al barrio donde está el instituto en el que enseño.
Cuando empecé, mi intención era seguir investigando en la iluminación fotográfica y en el retrato, enseñar como manera de probar teorías y modelos. Dando clases no me siento bien limitandome a repetir lo que dicen otros. Si doy clases es porque trato de cocinar el conocimiento para darle otra forma, para crear información y no solo para transmitirla.
Cuando empecé, y durante años, he dicho que quiero formar parte del mejor centro de enseñanza de fotografía que pudiera haber. Ahora no solo no estoy en el mejor, sino que ni siquiera puedo enseñar fotografía.
Pero parece que se ha acabado. No voy a poder volver a enseñar fotografía. Con los cambios actuales me quedo fuera de la fotografía. Por supuesto aún puedo enseñar televisión, o sonido. Pero nada de esto es para lo que vine aquí. Seguir solo supondrá despistar mi mente y hacerla ir por donde no quiero, por donde no se va a desarrollar.
No soy iuminador, no tengo ninguna experiencia ni en televisión, ni en cine ni en teatros. Todo lo que pueda hablar de esto es de oidas, de leer a otros, de escuchar a otros. Soy fotografo, lo que se es porque lo he trabajado. La iluminación que enseño es la que investigo. No repito lo que dicen los demás, desarrollo y doy forma, creo un corpus que de consistencia al conocimiento y a los procesos de trabajo. Investigo en esta dirección.
Pero con los cambios que hay todo esto queda fuera. Ya no podré enseñar a hacer un retrato, y tampoco los demás lo harán, se limitarán a decir como se fotografía una persona. No habrá trasfondo, el retrato quedará en un invento de la cámara y en cuatro reglas supersticiosas. No será más el retrato fotográfico como una técnica que añadir a la del retrato, una forma del arte con más de cuatro mil años de historia. No habrá más interpretaciones de roles, no habrá más buscar la luz desde el rostro hasta el foco, sino seguir pobres esquemas de iluminación. Yo no enseño a hacer fotos, enseño a ser fotógrafo.
Estos años han servido para dar forma a las ideas, para conocer a personas con las que seguir en contacto. Diez años para conocer a quienes merece la pena conocer. Ya no hay razón para quedarse.
Esto se ha acabado. No hay en España ninguna escuela en la que poder enrocarme. El sistema educativo te manda a enseñar de lo que no sabes en vez de aprovecharte en lo que si. Esto se acaba.
Creo que voya poner un bar.
En El Puerto de Santa María, el domingo 28 de junio de 2015.
Pero
Andrea tirando la basura
De mi trabajo personal sobre danza en la calle. Un paseo por la danza